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LA MISERIA NUESTRA DE CADA DÍA
Según la definición de la Real Academia
Española (RAE) la palabra “Miseria” significa: “Desgracia, trabajo,
infortunio; estrechez, falta de lo necesario para el sustento
o para otra cosa, pobreza extremada”.
Recuerdo que cuando era niño, en la década de los 80, la palabra miseria
estaba asociada directamente con su significado o bien como sinónimo cuando uno
veía a alguien que no estaba en su mejor momento en la vida y decía “che, que
miseria”.
Teniendo unos cuantos años más, bastantes como para separarme de aquella
cándida niñez, veo como la palabra "miseria" ya no la relacionamos
más con la pobreza en su sentido más genérico o económico como bien dice la
RAE, ahora para referirnos a la pobreza hablamos de “indigencia” o si vemos que
alguien está mal económicamente o en la vida en general, simplemente decimos “che,
que mal que anda fulano”.
Si bien, puedo decir que no es una palabra que se use en forma habitual
o se escuche en el cotidiano, cuando veo, leo o escucho noticias en los medios de comunicación, de éste país, la única palabra que
se me viene a la cabeza es “Miseria”.
Escucho la radio y las noticias hablan sobre una niña que denuncia como
fue abusada sexualmente y esclavizada
durante muchos años, un video con contenido sexual en un camping. Veo las
noticias en la televisión y dedican 25 minutos (ininterrumpidos, controlados
por reloj) hablando sobre una pelea a golpes de puño y patada entre jugadores
profesionales de fútbol, en un juego “amistoso” y sus repercusiones en la
justicia civil, o bien como un septuagenario mata a quemarropa a su vecino de
treinta años, por quemar la basura en la vereda. Leo un diario y entrevistan a
un senador de la república denunciando una campaña de desprestigio, orquestada
desde Twitter, ¿desde Twitter?, o bien titulan sobre la reunión de una actriz
estadounidense, el presidente de la república y “el pato celeste”. Entonces pienso,
"la mierda, lo único que hacen los medios de comunicación, hoy día, es
dejar en evidencia lo mal que estamos como sociedad, mostrando solo nuestras miserias”.
Los datos de la realidad de éste país dan números alarmantes para la
cantidad de habitantes que somos, ya sea en homicidios, violaciones, robos,
accidentes de tránsito, etcétera, pero mostrar éstos lamentables episodios día
tras día, minuto a minuto, con detalles lastimosos ¿nos ayuda a estar
“informados”, ser mejores personas o mejores ciudadanos?, yo no creo que sea
necesario saber cuantos impactos de bala fueron necesarios o en donde se los
dieron a una persona para que perdiera la vida, o cuantas puñaladas o si en la sección
de noticias internacionales cuentan que en la India fueron diez o quince hombres
los que protagonizaron una violación colectiva a una mujer. Creo que los informativos se han transformado en una picadora de
carne, que lo único que hace es mostrar un homicidio, dos copamientos,
cuatro rapiñas, luego aparece el presentador de noticias, con cara como si
hubiera pasado los números de la quiniela nocturna y en seguida una
propaganda de un enjuague bucal que si lo usas, te da más seguridad como hombre
y hace que puedas abordar con éxito a la mujer más codiciada de una discoteca.
Tanto que he escuchado en los medios sobre Responsabilidad Social
Empresarial (RSE), y que poco hacen por ello; si nos quieren hacer creer que haciendo
una ficción televisiva sobre las mismas miserias que “informan” todos los días,
las personas van a dejar de drogarse con pasta base o ir a alcohólicos anónimos
a enfrentar su enfermedad, dudo mucho que la RSE aporte, es más, creo que van
por mal camino. Haciendo una “buena publicidad”, mostrando imágenes de los
desastres de la catástrofe de turno, para recaudar alimentos, acompañados de
una “buena música” para despertar nuestra congoja, tampoco aporta ya que lo
menos que se le da importancia es a los teléfonos y direcciones para llevar las
donaciones, creo que así tampoco contribuyen mucho con su idea de RSE.
No pretendo censurar al canal “tal” o la radio “cual”, pero mirar al costado o simplemente cambiar de canal o página web, tampoco soluciona nada y la verdad creo que tenemos derecho a expresar nuestra
disconformidad y reclamar ante tal abuso
de poder y desinformación. Estoy harto que en algunos noticieros radiales lean
las portadas de los diarios o simplemente levanten la noticia, prefiero que si
van a repetir las tendencias políticas de los diarios, por lo menos tengan la
decencia de hacer periodismo de opinión y marquen la cancha abiertamente y no
sean cipayos indiferentes y estúpidos. Me parece que en los informativos de
televisión, deben tener la integridad intelectual de no meter una noticia como
relleno, del orden “tras cuatro meses de muerte clínica, una mujer dio a luz”
porque no tienen o no quieren, mejor dicho, incluir noticias de calidad que
involucren un trabajo periodístico y simplemente opten por levantar una noticia
de otra televisora, le coloquen un sócalo en castellano y pisen al locutor de
fondo. Creo, que si se tomaran el tiempo de pasar noticias que nos hacen como
colectivo y como sociedad, yo que sé, que hablen de nuestros logros, virtudes,
emprendimientos que hacen al quehacer de algunos colectivos, o bien investigar
otro tipo de noticias y no que dediquen especial énfasis en la crónica policial,
dar detalles lastimosos del asesinato más cruel del momento o poner una noticia
de mala praxis en un hospital público, para que en definitiva el costo del valor
del minuto televisivo en ese espacio valga más.
No debatir sobre éstos temas o simplemente no mostrar descontento, es
aprobar la forma que tienen los medios de comunicación de amasijar, triturar y
devolver un bolo revuelto de cosas que lo único que terminan haciendo es mostrando
solamente nuestras miserias, y creo fervientemente que no solo somos eso en
éste país, apuesto y construyo día a día para que no seamos solo eso, lo hago
por mis hijos, lo hago por mi esposa, lo hago y creo por mi madre y amigos, por
el colectivo todo. Me dirán que con esto no es suficiente, pero peor fingir que no existe el problema o esperar que una ley arregle todo,
cuando hay miles de uruguayos que consumen esa basura ya sea por televisión, internet, radio o escrita.